Ayer al llegar a casa seguí reflexionando sobre el tema
de la lengua española y pues mis ideas se sobresaltaron sobre unos apuntes que
tenía al respecto y los quiero compartir con ustedes.
El español que se habla en Hispanoamérica se caracteriza por tener sus peculiaridades en cada pueblo, región, país. El español de América ha adquirido modalidades especiales de significado que lo diferencian del español peninsular al reflejar los nuevos valores sociales, económicos y culturales de cada región y al poner en funcionamiento los propios recursos que la lengua ofrece. Un ejemplo de todo esto son los cambios producidos en el léxico del español de Cuba después del triunfo de la Revolución que se ha caracterizado por el surgimiento de muchos neologismos como federada, cederista, microbrigada, etc.
Siempre que se realiza un estudio sobre las
peculiaridades lexicológicas hispanoamericanas habrá que partir de la
influencia que ejercieron indoamericanos y negros en la configuración de
nuestra nacionalidad. El hombre oriundo de estas tierras fue casi exterminado
en los primeros años de la conquista, pero dejó sus huellas en el léxico
español. La lengua que se habla en Cuba era el Arauco insular la primera
lengua que los españoles estuvieron en contacto.
En el habla popular de cuba se han conservado 421
indoamericanismos de los cuales 180 proceden del Arauco insular. A partir del
siglo XVI hasta 1873 entre Cuba y África se desarrolló el tráfico de esclavos.
Hombres extraídos de distintas regiones de África con lenguas y dialectos
diferentes convivieron en Cuba. Según Fernando Ortiz los blancos se
apoderaron de las palabras de las lenguas africanas como: bembé, conga,
bilongo, ñame, fufú, etc.
En Cuba al igual que en Hispanoamérica el español
presenta algunas variaciones en el orden fonético como el ceceo y el yeísmo que
la RAE define
como la pronunciación de la z o la c ante e, i, como s, y la
pronunciación de la doble l como y. Además en
Cuba el hablar descuidado ha llegado a crear confusión en la pronunciación de
la r y la l. Ejemplo: Venil por venir, cardo por caldo. Este
fenómeno se registra con mayor frecuencia en la zona oriental del país, además
en la zona central y occidental la asimilación de la r y la l a
cualquier consonante que al siga, por ejemplo: Bálbaro por bárbaro, cuelda por cuerda, cármate por cálmate.
La aspiración de la s al final de
la palabra o sílaba es un fenómeno totalmente generalizado en Cuba. Hay palabras
que se utilizan o se usan solo en Cuba estas so llamadas cubanismos por ejemplo: cutara, aplatanarse,
desbotonar.
En nuestro país se está produciendo una nivelación del
idioma debido a condiciones sociales, en esta nivelación de la lengua se
ha ido renovando al compás del desarrollo cultural y político y sigue
renovándose.
En mi criterio personal las nuevas generaciones de hoy
deterioran el idioma incorporando cientos de neologismos, vulgarismos y
préstamos lingüísticos en sus quehaceres lingüísticos, sin respetar en
ocasiones la norma del español.
Es necesario afirmar que todavía hay un largo camino por
recorrer en el estudio del española hablado en Cuba porque soy de los que
afirman que en breve seremos testigos de la creación de un nuevo idioma EL
CUBANISMO.
Muy interesante y bien documentado. Se nota que la autora es una experta en lengua castellana.
ResponderEliminarGracias amigo. A pesar de todo el español como una sola lengua ha fructificado y fructifica tanto en la literatura española, hispanoamericana como en la cubana, los más destacados escritores han contribuido a enriquecer y perfeccionar una lengua que es una y propia para todos los hispanohablantes, a pesar de los pesares
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